¿Qué hace falta para desarrollar un pensamiento crítico?
El consenso mayoritario defiende que el pensamiento crítico se puede aprender fácilmente si se cultiva desde la niñez, pero es algo más complejo adquirirlo en la vida adulta. Desde mi punto de vista, esta habilidad no se puede enseñar pero sí aprender. Para lograrlo, puedes poner en práctica la siguiente técnica: comportarte como si ya lo dominases.
Esta tarea te llevará a cuestionarlo todo, meditar a diario y ejercitar la cautela para evaluar tus prioridades. ¿Te atreves?
Alcanza seguridad en ti mismo
Para tomar decisiones también tendrás que confiar en que éstas serán correctas. Así que, además de cultivar tu pensamiento crítico, también tendrás que ganarte tu propio respeto. Casi siempre somos capaces de reconocer cuándo alguien es una persona satisfecha consigo misma: que camina con paso seguro, se expresa con fluidez y transmite firmeza.
Ese estado emocional no se alcanza de un día para otro, pero si empiezas a incorporar ciertos hábitos, verás cómo tu solvencia y liderazgo se afianzan:
- Prepárate en profundidad: estudia, perfecciona y conoce todos los aspectos relevantes para tu profesión.
- Exprésate de forma adecuada: el hábito de la lectura es un excelente aliado para mejorar.
- Gestiona adecuadamente los silencios: a veces es conveniente guardar algo de lo que sabes para otro momento y no destapar todas tus cartas a la vez.
- Viste de forma acorde al momento: emplea colores que pasen desapercibidos. Que no te observen por lo que llevas, sino por lo que tu eres.
- Retribuye emocionalmente a tu entorno felicitando y agradeciendo.
- Sé generoso y muestra respeto por la opinión de los demás.
- No te muestres excesivamente halagador.
- Sonríe.
- No digas ni hagas aquello que no quisieras ver mañana publicado en la portada de un periódico.
- Renuncia a tu ego en beneficio del protagonismo ajeno.