¿Tu trabajo no te motiva? Revisa tus prioridades

Gran renuncia en Estados Unidos, renuncia silenciosa en España, burnout… En los últimos meses las reflexiones en torno a la insatisfacción laboral y sus efectos abundan. Un estudio de la consultora en Recursos Humanos Hays señala que en 2023 lo que le devolvería la motivación para trabajar al 65% de la población española sería ganar más dinero.

Una aspiración que se remonta a… ¿el origen del trabajo? No tan atrás, pero en 1985, Michael Leboeuf publicó El gran principio del management. En esa obra sostiene que que las personas solo realizamos aquellas tareas que implican una compensación. Pero, también indaga en la siguiente pregunta:

Si no se obtienen los resultados esperados, ¿qué se está recompensando?

Las tesis de Laboeuf han evolucionado al compás de diferentes corrientes humanistas que se han esforzado en puntualizar algo: el dinero no lo es todo. Una afirmación que yo también suscribo. El dinero se desea cuando no se tiene, pero cuando se obtiene deja de ser una motivación. Además, el término compensación no debe leerse en términos económicos exclusivamente.

El escalón salarial

El dinero no lo es todo si tienes el suficiente para cubrir tus necesidades básicas. Ese condicional es la madre del cordero en este asunto. Quienes gozan de salarios por encima de 50.000 € enfatizan el reconocimiento, la conciliación, el desarrollo profesional o la autonomía como variables que sostienen su satisfacción laboral. El resto no renuncia a ellas, pero no es la prioridad.

La retribución emocional es fundamental en cualquier organización que aspire al crecimiento, propio y de su equipo. Sin embargo, no es posible vivir de retribución emocional pero sí se puede vivir solo de la compensación económica. Lo ideal para que alguien se sienta motivado es que exista un sano equilibrio entre dar y recibir; si además mis acciones están alineadas con un propósito vital, tenemos la cuadratura del círculo.

Con estos cimientos, si anhelas hallar tu propósito por encima de todo: prepárate para interiorizar que vivirás para tu trabajo. Un recorrido que exige tres grandes renuncias.

Tendrás que olvidarte de:

El miedo a perder
e incertidumbre

La comodidad

Idemnizaciones y beneficios

Tendrás que atreverte a saltar sin red. Y para eso, además de coraje, hace falta perseverancia y actitud.

Estas son las 15 afirmaciones que te ayudarán a lograr tu propósito:

Soy Marcelino Gilabert y puedo ayudarte a mejorar tu organización, la gestión de tu equipo, la toma de decisiones y otros procesos empresariales.